¿Qué es Cristo?

 “¿Qué es Cristo?”


-La Conciencia de Dios viviendo en nosotros-


Muchos no, son legión, aquellos que por vergüenza, no utilizan la Palabra Cristo; en tanto que se encuentran desacreditadas todas y cada una de las sectas cristianas, comenzando por las más antiguas religiones oficiales; pero, en nuestro caso, lo cortés no quita lo valiente y, nosotros, en tanto que aspirantes a la Hermandad de los Rosacruces, como cristianos, debemos gritar, públicamente, el Nombre de Cristo para reivindicarlo y colocarlo en su justo Lugar.


Cristo es Dios, Cristo vive en tí y, por lo tanto, no tengas miedo en pensarlo y afirmarlo: Dios es parte consustancial contigo, tú eres Dios. Esa es la más grande herejía. Bendita Herejía.


“Solamente en Cristo,

solamente en Él//

La Salvación se encuentra en Él//

No hay otro Nombre dado a los hombres//

Solamente en Cristo, solamente Él”


(Popular Corito Evangélico)


Nuestro “Colegio Invisible de la Rosacruz”, en tanto que portal didáctico del Aula Madre Lucis “Rosa Mística” de la F.R.A. de España, no pretende ser otra cosa que un faro de luz, alumbrando en las tinieblas del Caos y, donde esa Luz no deja de ser otra cosa que Cristo y el Caos el Mundo en el que vivimos.


Cristo o Chrestos no es una Palabra hebrea sino griega que, en Arameo, significa el Enviado el Mesías; pero enviado ¿De qué y para qué?, para salvar al Hombre y a la Humanidad de la desesperación provocada por la incertidumbre de no conocer nuestro Lugar en el Universo; ese otro vocablo que debe de acompañar a Chrestos para que cobre sentido es Jesús, del griego Iesous o Iesus en latín que significa “El Salvador”. Así el Término Jesús el Cristo o Jesucristo, independientemente de la existencia o no del Individuo seudo histórico, significa “El Enviado para salvarnos”


“Una mirada de Fe/)

Una mirada al Señor es la que puede salvar al Pecador//

Y si tú vienes a Cristo Jesús, el te perdonará//

porque una mirada de Fe, es la que te puede salvar”

(Popular Corito evangélico)


Cristo vive en nosotros, dentro de nuestro corazón, agazapado y sumido en un profundo sueño como una semilla de capullo de rosa esperando el agua que la haga florecer.


El Salvador Enviado o Mesías esperado no es otra cosa que el matrimonio entre la información de la Gnosis procedente de las profundidades siderales con la Chispa del Espíritu de Dios que vive en nosotros. Jesucristo, así nace en nuestro interior y si la Personalidad está preparada, que lo debe de estar, alimenta al pequeño recién nacido con su propia esencia hasta que el infante haya de sentarse, como Rey en el Trono del Corazón primero y tras ascender a la cabeza, alimentado ya con nutrientes de mayor enjundia, la carne de la que habla Pablo, ocupar como Soberano absoluto el Trono de la Cabeza, la Mente. Ese proceso es conocido como Cristificación y su resultado es la Transfiguración o salvación del Alma mediante la Fe, recuerden la Gnosis o Conocimiento de Dios, que se encuentra en nuestro interior, en ese Germen o semilla divina que deberá de transformarse en Jesucristo, nuestro Maestro Interior; pero que, para diferenciarnos de las religiones exotéricas hemos venido en denominar como Cristo el Mesías; pero, en el fondo no dejan de ser otra cosa que palabras que podrían ser sustituidas por cualquier sinónimo y en cualquier idioma.


El problema es que Jesús y Cristo son términos que pertenecen a nuestra Tradición Cristiana en Occidente y ese, ese es el motivo del por qué lo usamos. No se trata de que seamos unos fanáticos religiosos que compartamos dogma y doctrinas con la antiguas religiones del Estado, sino que estamos dispuestos a conservar nuestra Tradición y Jesucristo, como el Mesías Salvador o el Salvador enviado, son una parte sustancial de nuestra Tradición Rosacruz.


Lo importante, de veras, no es el Objeto o Sujeto sino lo que ese Objeto o Sujeto significan en su sentido más profundo. 


No es cuestión de que vayamos realizando imágenes de un Sujeto y Objeto al que adorar o reverenciar, sino de entender que el Salvador Enviado se encuentra en nuestro interior, que forma parte de nosotros mismos; de que es nuestro verdadero Ser, del que nosotros, la Personalidad, somos un mero celador, un conserje, mayordomo y servidor de quién en verdad somos como Ser. 


Que la Luz de la Gnosis resplandezca en las tinieblas de la Ignorancia.


Frater Toni (Hermano Lego R+C)