La Gnosis Perenne
“La Gnosis Perenne”
-Cuasi infinitas versiones, una sola Gnosis-
A.M.L. “Rosa Mística”; de la F.R.A. española
¡Paz, Tolerancia, Verdad!
Antonio Piñero, uno de los más importantes estudiosos, vivo, de la Gnosis de los primeros siglos del Cristianismo, nos respondió, a una pregunta nuestra, en una Conferencia suya, en el Ateneo de Madrid, que debieron de existir tantas versiones de la Gnosis como gnósticos haya habido.
Esto es muy importante tenerlo en consideración; en tanto que, a veces, se nos recrimina con que no estamos divulgando la verdadera Gnosis ¿Verdadera? Seríamos un extraordinario divulgador de las Gnosis del pasado si nos dedicásemos a recopilar datos de algunas de las Gnosis que existieron y las hiciéramos públicas; pero ni tendría gracia ni sería una verdadera Gnosis, en tanto que la verdadera Gnosis es el Conocimiento interior, particular, que sale del Alma de cada cual, independientemente de que éste contradiga a muchas de las versiones gnósticas existentes o que hayan existido.
Quisiera que lo viesen desde el siguiente punto de vista. La Gnosis es el Conocimiento de uno mismo, que también es el Conocimiento de Dios en mí y en tí. La Humanidad es una diminuta pieza del puzle del Universo y cada humano somos una pieza aún más diminuta del Puzle que conforma el puzle de la Humanidad; luego entonces, es bastante complicado que existan dos visiones idénticas de la Gnosis; en tanto que cada protagonista del Drama de la Vida tenemos experiencias propias y que, seguro, diferirán del resto de experiencias de los otros.
Si has leído, e incluso estudiado algún voluminoso tratado de Gnosis, es muy probable que no sepas de Gnosis salvo que hayas tenido experiencias propias al respecto. Si dudas de haber encontrado la Gnosis, casi con total seguridad que no la has hallado; pero, del mismo modo sucede si presumes de encontrarte en su posesión.
La Gnosis llegó a éste Mundo con los seres humanos, si no antes; en tanto que, aún, no podemos asegurar que los seres humanos seamos los únicos seres conscientes de la Divinidad en el Universo.
Si eres unos de nuestros afortunados que ha tenido la oportunidad de ojear diferentes libros que tratan sobre los gnósticos, estarás de acuerdo, con nosotros, en que la versión de Valentín, gracias a la difusión que le diera el Maestro Jung, es la más difundida y que la versión más conocida, en la actualidad, es la proveniente de la Biblioteca gnóstica encontrada en Nag Hammadi; pero debéis de tener presente que tanto la Pistis Sophia o Evangelio de la Verdad y el resto de los escritos encontrados en Nag Hammadi conforman una infinitesimal parte de lo que fue el gnosticismo durante los dos primeros siglos del Cristianismo Primitivo. El resto, como bien sabéis, fue confiscado por los padres de la Iglesia Católica y, con casi total seguridad, destruidos por el fuego; el resto desapareció en el segundo y definitivo incendio de la Biblioteca de Alejandría, porque el Cristianismo nació allí influenciado por el Neoplatonismo, el Hermetismo y el Pitagorismo.
Por lo tanto, no te extrañes cuando leas que la mayoría dicen que el Demiurgo es un Demonio y otros, como nosotros, que el Demiurgo vive fragmentado en su Creación y que ese Demiurgo que desapareció para siempre, resurgirá al final del Tiempo en la Nueva Figura Cósmica del Adán Celeste o Adán Kadmón de los Cabalistas; pero lo que nosotros digamos o vosotros hayáis leído no es lo importante sino lo que vosotros seáis capaces de entender; en tanto que todas las historias son fábulas y leyendas que esconden la llave del Conocimiento Interior y que cada cual está obligado a interpretar a su modo y manera.
Unas Gnosis eran más místicas y otras más mágicas y teúrgicas. Unas más lucifericas y serpentinas y otras más en consonancia con la ortodoxia paulina que es de donde surgió el Cristianismo que luego sería apropiado por el Imperio Romano como Religión de Estado.
Existieron Gnosis que propugnaban el sexo desenfrenado y otros, por el contrario, la total abstinencia sexual y todos ellos, los movimientos gnósticos mencionados; pero también los omitidos aportaban sus razones para seguir uno u otros tipos de comportamiento moral. Es decir, porque hoy se haya popularizado una determinada versión del gnosticismo, eso no quiere decir que ese gnosticismo, tal cual, hubiese existido en los dos primeros siglos del Cristianismo ni que hoy sea la única versión accesible de la Gnosis; es decir, no podemos hablar de una única Gnosis sino de diferentes versiones gnósticas más sus interpretaciones y entre las que encontrarás la nuestra; pero también la tuya si te atreves a adentrarte en el Mundo del Conocimiento Interior; en tanto que conocerse a sí mismo es lo mismo que Conocer a Dios y, bueno, de eso trata la Gnosis; pero sosteniendo, humildemente, que lo que cada uno podemos aportar no es más que una parte infinitesimal de la Gnosis Perenne y que solo el Pleroma lo puede vislumbrar de la forma panorámica que supone la Eternidad sin tiempo de principio ni tiempo de final.
En Luz Verdad y Amor
¡Que las rosas florezcan en vuestra Cruz!
Frater Aralba R+C; S.C. de la F.R.A. en España; Linaje Huiracocha, Aureolus, Camael, Amorifer