Cultivando el excepticismo

 “Cultivando el Escepticismo”


-La Duda, bien entendida, es el mejor Consejo-


Ya estoy viendo algunos rostros ojipláticos de incredulidad. ¿Qué carajo dice éste hombre? En los ámbitos esotéricos y religiosos, comúnmente, se anima justo a todo lo contrario; es decir, a apartar de nosotros los prejuicios y, haciéndonos como niños, aceptar lo que los “maestros” nos han legado. 


Lo cierto es que es verdas que debemos desprendernos de cualquier tipo de prejuicio; pero la duda debería de persistir, siempre, hasta que la Luz de la Gnosis, desde el interior, nos ilumine con su Verdad, la Verdad de Cristo, el Señor Dios.


El Gnóstico y, por lo tanto, el verdadero Rosacruz no debería de ser una Persona especialmente dada a la credulidad; sino justo, todo lo contrario, con la tendencia innata a dudar de todo y cuando decimos dudar lo hacemos en el pleno contexto de la Palabra; es decir, dudar tanto de la existencia como de la no existencia de algo.


Pero, entonces, algunos dirán que estamos promoviendo el ateísmo; pero eso no es cierto, aunque en verdad, no creamos en cualquiera de los dioses homologados de las religiones oficiales y, por lo tanto, de aquellos Entes que nos dibuja, negro sobre blanco, la Teología.


La Gnosis o Conocimiento Interno, conocida en nuestro “Colegio Invisible de la Rosacruz”, como “Fe” es una experiencia personal; es decir, se trata de un conocimiento de primera mano, cómo Tomás penetrando, con su mano, en la llaga abierta, por la lanza de Longinos, en el costado de Jesús- Cristo resucitado.


El Gnóstico ni cree ni deja de creer en aquello que le venga dicho por un tercero. 


Un Gnóstico posee la certeza de las cosas que son y de las cosas que no son, porque su experiencia con Cristo, el Maestro Interior, la Fe, da testimonio de la Verdad inmanente y que no tiene, necesariamente, que parecerse a la realidad temporal existente.


Un Gnóstico jamás será tasativo con aquello que, temporalmente, ignora o desconoce; es decir, no se le caen los anillos por demostrar su ignorancia en un determinado asunto “Esto lo desconozco; pero deja que lo medite con la almohada”. Meditarlo con la almohada no es otra cosa que consultarlo con el Maestro Interno mientras nos encontramos sumidos en la profunda relajación que supone estar dormidos. Generalmente, mediante sueños lúcidos, con permiso de la intuición, es como vienen las respuestas de nuestro Ser Interno.


Ser escéptico, dudar de todo lo que desconocemos es una gran virtud y nada tiene que ver con el agnosticismo o, lo que es peor, el Ateísmo, otro fanatismo tasativo. El Gnóstico Rosacruz no cree en algún dios, tiene Fe en Él, en tanto que posee una experiencia personal, interna, con Él; es por ello que, los Estudiantes Rosacruces hablamos del “Dios de nuestro Corazón y de nuestra Comprensión” Esto es de vital importancia, en tanto que simboliza a Cristo que es la parte del Dios Eterno que vive en nuestro interior; pero, también, con humildad reconocemos que solo podemos comprenderlo en el Grado en que se nos permita y nos encontremos capacitados; es por ello que, la Gnosis, en nosotros, no es el Conocimiento absoluto de todo, lo cual sería una terrible arrogancia, sino que deja lugar para la natural ignorancia y el desconocimiento siendo ahí donde debemos de cultivar la Duda y el escepticismo y no creernos lo primero que nos digan sin que, como Tomás, no tengamos una experiencia personal; es decir, gnóstica del Asunto.


El Gnóstico tiene Fe en Dios porque lo experimenta y habla cada día con Él; pero el gnóstico, en tanto que Persona, no tiene acceso instantáneo a todo el Conocimiento y, por lo tanto, ante cualquier Cuestión que desconozca, lo mejor que puede hacer es reconocer dicho desconocimiento en lugar de inventarse, sobre la marcha, cualquier respuesta por muy razonable que pudiera parecer.


Así, la Duda y el Escepticismo deben de ser los compañeros necesarios de todo Estudiante de la Gnosis. Solo cuando el Ser Interno nos muestre la Verdad podremos decidir, con conciencia, acerca de la certeza o falsedad de determinada Realidad.


Frater Toni (Hermano Lego R+C)