La ilusión de vivir

 “La Ilusión de Vivir”


-Germen de la Esperanza o de la Decepción-


La Ilusión puede enquistarse mediante la Religión, el fanatismo ateo y el cientifismo lo son también, y transformar el vocablo fe en un mero creer, en la confianza de aquellos que dirigen nuestras vidas o en Gnosis, mediante una intensa vida interior, espiritualidad verdadera si se quiere; siendo entonces cuando la Fe cobra su verdadero significado de Conocimiento interior de la Divinidad, de Dios. Lo único que existe y por lo que, y donde, y de que todos vivamos y seamos conscientes de la Existencia.


La Ilusión actual que proporciona la Cultura de nuestra Sociedad es frustrante, pues al estar fundamentada en el materialismo cientifista ateo, termina desembocando en desilusión; es decir, frustración, impidiendo que la ilusión pudiera derivar o evolucionar  hacia la Esperanza que proporciona la Fe de la Gnosis “El Conocimiento verdadero de Dios”, en tanto que sentimos y vivimos a Dios, Cristo para los Rosacruces, dentro de nosotros mismos.


La desilución da lugar a la decepción o desesperanza y provoca depresión y ansiedad. Una situación que puede conducir al Ser Humano hacia un cambio radical en su vida, a modo de defensa por su supervivencia. Ese cambio puede llevarnos al suicido o conducirnos a desalmarnos con el fin de no sufrir. Esto último conduce a la formación de un Ser Humano Egoísta y sin Empatía; es decir, a un Psicópata Integral, miembro de una Sociedad Sociópata y autodestructiva.


La Psicopatía, cada vez más generalizada en nuestra Civilización, convierte nuestro Mundo en algo claustrofóbico y difícilmente respirable; es decir, en un Entorno donde vivir puede resultar insoportable para cualquiera que posea un mínimo de sensibilidad emocional.


Por lo tanto, la desesperanza hace que en nuestro Mundo haya cada vez más ministros del Materialismo egoísta y menos personas sensibles, las cuales acaban suicidándose, porque perdieron, o no encontraron nunca un motivo, un sentido elevado para poder seguir viviendo.


Desde este punto de vista, la  Religión, para el Hombre, hasta recientemente, ha supuesto una fuente de ilusión, posible esperanza futura, para los seres humanos; pero esa ilusión, con el adoctrinamiento materialista se va eliminando, con las herramientas de la no educación y los medios de ocio, entretenimiento e información o manipulación. Esa Ilusión la están acabando y con ello, la posibilidad de que pudiera evolucionar hacia una verdadera Esperanza.


Así, la Ilusión, según el punto de vista  puede derivar en decepción destructiva “Psicopatía” o autodestructiva “Suicidio”; dependiendo ello de la Fortaleza mental del Individuo.


En ese sentido, la Religión no es mala en sí, sino que falta de todo dogmatismo y adoctrinamiento, puede ser una Vía que conduzca a la reflexión interna, porque es dentro de nosotros donde podemos encontrar la Verdad, nuestra Verdad, y donde encontrando a Cristo, el Maestro Interior, acceder a la Gnosis o Fe genuina que nos conduzca a una Fe inquebrantable de que somos parte de Dios, que somos uno con Dios, que somos periféricos de adquisición de experiencias para el mismo Dios, de que nosotros, al mismo tiempo, somos y no somos importantes; es decir, nos conduce a no sobrevalorar; pero tampoco a infravalorar la Vida, observar y vivirla desde su justo punto de vista, ni más ni menos. 


Desde ese punto de equilibrio vital es imposible que pueda aparecer la decepción y, por lo tanto, tampoco sus nefastas consecuencias, ya sean la psicopatía integral del Individuo o la sociopatía de la colectividad, de un lado o el suicidio o falta de interés de vivir por el otro.


La Espiritualidad que proporciona la Gnosis nos hace recobrar ese interés por la Vida y, en tanto que Fe, nos proporciona la Esperanza por seguir luchando en ésta Guerra que sabemos, de antemano perdida para el Mundo; pero que es ganada para Dios que vive en Él, dado que es su Esencia y fin último y, por lo tanto, también en el Hombre, en nosotros.


Busca dentro de Tí a Cristo, quien te dará la Gnósis y un sentido profundo para seguir viviendo, aunque tengas que partirte el pecho y perder la Vida en el intento; algo que invariablemente, sucederá en todos nosotros. Lucha, sé valiente, enfrenta la Vida como un guerrero hasta la muerte, y cultiva la paciencia del estoicismo. No desistas.


Frater Toni (Hermano Lego R+C)