Introducción a los Misterios Mayores
"Introducción a los Misterios Mayores"
¿Dice usted, que está iniciado en los Misterios Mayores?; Me temo mucho, mi Querido Amigo, que se encuentra, en extremo, engañado, salvo que solo sea el fantasma de un fallecido.
Desde hace mucho tiempo vengo leyendo lo absurdo de que los Misterios Mayores tratan sobre algún tipo de Iniciación tántrica y de carácter sexual.
Mirad, mi amigos. Los Misterios Menores "de la Diosa Isis", son los que corresponden al Plano Terrestre y esto ¿Qué quiere decir?; Pues que sus iniciaciones están relacionadas con éste Plano de existencia y, lo más importante, deben de realizarse en éste Mundo; es decir, estando vivos. No, siento desilusionarlos; pero los Misterios Mayores, los grados superiores al Noveno, inexistentes por cierto, nada tienen que ver con algún tipo de Magia Roja de carácter sexual.
Los Misterios Mayores, los del Dios "Osiris", muerto y descuartizado por su Hermano Seth, son acerca de los planos superiores, los que se pueden experimentar más allá de la Muerte; dicho de otro modo, usted tendría que morir primero para poder ser iniciado, en los planos internos, acerca de estos famosos Misterios Mayores. Solo los faraones y los sacerdotes de Egipto podían ser iniciados en estos misterios y solo a título simbólico.
La Rosacruz, como Fraternidad Iniciática dedicada a los "Misterios Menores", solo tiene Nueve Grados de Iniciación en los planos internos, aunque algunas organizaciones rosicrucianas han desarrollado una suerte de rituales públicos que tratan de dramatizar aquello que es personal e intransferible del propio Iniciado, su Iniciación Interna, lo cual es una imposibilidad.
Para más "Inri", algunas de dichas organizaciones, por cuestiones, entendemos, meramente mercantilistas y de estrategia financiera han elevado esos grados a más de 9, ya sean 12, 13, 33, 99… Esto no funciona así y ellos lo saben; pero es la mejor forma que han visto para poder mantener interesados a sus miembros y que no abandonen la Organización con el único fin de que sigan cotizando; es decir, soltando la pasta.
Después de esos nueve grados, de los que hablamos, solo queda, pues eso, morir y elevarse a los planos superiores con el fin de experimentar lo desconocido en éste Mundo; es decir, los Misterios Mayores.
Pero entonces, ¿Nada podemos decir acerca de lo que pueden tratar esos grados innominados y conocidos como "Misterios Mayores"?; Algo quizá sí, pero muy poca cosa y tan solo pinceladas muy someras y difusas.
Los Misterios Mayores no nos incumben a los seres encarnados en tanto que trascienden las leyes Cósmicas del Universo; es decir, de los principios herméticos y se sumerge, de Pleno, en la esencia de lo que es Dios, el Pleroma, las infinitas células que lo conforman, los eones. Se trata, nada menos, que de conocer, de cerca, a los Eones, como Sophía, y ver cómo funciona el Consejo Celestial, compuesto por Eones, y que gobiernan, ya no nuestro Universo, sino un Multiverso infinito y sin límites.
Los Misterios Mayores, traspasan el concepto de las Leyes de la Naturaleza y se sumerge en el pantanoso y desconocido Mundo de los infinitos y de las utopías. De cómo, por ejemplo, un Alma en un Universo puede ser una Persona, en otro, esa misma Alma, de forma simultánea, un Monstruo de mil pies y en otro, por ejemplo, una entidad incorpórea y que se alimenta de las emociones de los seres vivos y así, hasta el infinito.
Los Misterios Mayores tratan de aquello que es imposible que pudiera tener alguna explicación, bajo las leyes físicas, en nuestro Universo.
Con sinceridad, ocuparse en nuestro Plano de cosas que parecen fantasía, nos parece una pérdida de tiempo, en tanto que lo que podemos decir, con palabras humanas, son meras elucubraciones que no hay forma de demostrarlas, ni tan siquiera con la Lógica de la Razón. ¿Alguien puede, verdaderamente, explicar lo infinitamente grande y lo infinitamente pequeño? No se puede, pues trasciende los límites de nuestra Imaginación.
¿Alguien puede explicar a Dios, como funciona, por dentro, la Mente Divina? Estamos seguros de que ninguno de nosotros puede realizar tal cosa y, queridos amigos y amigas, de cosas así tratan Los Misterios Mayores.
Trata de la relación de fuerzas entre el Amor cohesivo de Dios que tiende a reunir todo en una singularidad sin dimensiones y su Sagrada Voluntad de no parar de hacer y expandirse en múltiples dimensiones y universos diferenciados.
Se trata de la relación del Pleroma como Mente Única con su Consejo Celestial, conformado por los eones encargados del gobierno de los diferentes universos. Se trata del Eón Sophía, el responsable de que nuestro Universo exista y de sus decisiones que lo vinculan con la Creación de su Emanación, el Demiurgo. De eso precisamente tratan Los Misterios Mayores, de la continua emanación desde el Pleroma hasta los seres sintientes de los diferentes mundos. Seres, ellos, unas veces poseedores de Alma y otros meramente constituidos como soportes meramente accesorios, como los arcontes.
Si ustedes lo desean podemos tratar de todo ello; pero sepan que, de hacerlo, nos introducimos en los mundos de la Fantasía y de la Ciencia Ficción; es decir, de la mera especulación y la pregunta pertinente, en éste caso, es ¿Merece la pena ocupar nuestro valioso tiempo en descubrir los Misterios Mayores, cuando podríamos ocuparlo en seguir adquiriendo experiencia vital y perfeccionando nuestro Conocimiento de los Misterios Menores?.
Os voy a poner una breve analogía: ¿Puede servir de algo, a un estudiante de Primaria, que se lo bombardee, literalmente, con abstractos conceptos de Física Cuántica? Humildemente, consideramos que no y es por dicha causa que el "Colegio Invisible de la Rosacruz" no se ocupa de aquellos misterios que trascienden a nuestro Plano de existencia; pero eso no quiere decir, que no se nos prepare para enfrentarnos a ello. Y bueno, en eso consisten los Misterios Menores de la Rosacruz, dado que se trata de una Escuela Preparatoria, intermedia, para cuando hayamos transitado ésta Vida, y que podamos enfrentar los estudios superiores de aquello que trata "Osiris", lo que hay, en verdad, más allá de la Muerte.
Preocuparnos ahora por los Misterios Mayores, es una inutilidad manifiesta y una pérdida de tiempo imperdonable. ¿Os imagináis dedicando toda vuestra vida en realizar una inmensa enciclopedia acerca de lo tratado en los libros de Harry Potter?; Pues sería exactamente lo mismo si decidiérais investigar acerca de los Misterios Mayores, en tanto que lo único claro que podríais sacar es mera especulación y que, muy probablemente, se encontrase equivocada.
Al menos, por favor, tened en cuenta que los Misterios Mayores nada tienen que ver con la forma en que usemos el Sexo en nuestro Camino de Transformación Espiritual. Y por una mera cuestión de racionalidad ¿De qué va el sexo? De reproducción y placer. Cosas muy básicas y materiales que pertenecen al ámbito de los Misterios Menores, independientemente de que pueda utilizarse como una válida herramienta para el Crecimiento Espiritual.
Si queréis podemos hablar del sexo de los ángeles, de la eternidad del Pleroma y su infinitud o de cómo crean, dentro de sí mismos, los eones los diferentes universos. Todo ello pertenece a los Misterios Mayores; pero, en verdad ¿Creéis que merece la pena y que podría ser productivo para vuestro Crecimiento Espiritual?. Tened por cuenta que esa curiosidad por conocer todos los misterios es propio de la Personalidad; pero la Personalidad, jamás estará capacitada para conocer los Misterios Mayores, relacionados con la Divinidad y a lo sumo podría servirle cómo mera distracción como ver un cómic de Marvel o una Película de Disney; pero sin llegar a comprender ni aprovechar su verdadera profundidad Espiritual; entre otras cosas porque no estará capacitada para hacerlo antes de su muerte.
Aralba R+C