Antes del comienzo

 “Antes de comenzar, deshazte de los prejuicios”


-Va siendo hora de comenzar a pensar por uno mismo y actuar en consecuencia-


“Tan pronto como naces, te dan un nombre, una religión, una nacionalidad y una raza. Pasas el resto de tu vida definiendo y defendiendo una identidad ficticia"


(Brandon Garic Notch)


Durante los doce grados anteriores te hemos venido recordando que tu Libertad Personal, el Libre Albedrío, debería de ser sagrado y tu Herencia Divina más preciada. Claro, otra cosa es lo que nosotros hagamos con esa Libertad. Es nuestra Responsabilidad.


Fijaos si es algo tan importante que el propio Jehová, como castigo, no pudo quitarle la vida a Caín por haber asesinado a su Hermano Abel; sino que lo maldijo y lo condenó a vagar por la Tierra por el resto de su Vida. No es baladí éste hecho, pues le proporcionó a Caín la oportunidad de testimoniar la importancia de la Libertad Personal y la Responsabilidad que ello conlleva. 


Es curioso que, Autades, habiéndole perdonado la Vida a Caín, los seres humanos se arroguen la capacidad de quitar la Vida a sus conciudadanos, ya sea mediante guerras o la Pena de Muerte; respecto a la Eutanasia o Suicidio, recuerden que es el Pecado Imperdonable contra el Espíritu Santo. Algunos pensarán que Suicidarse es la manifestación suprema del Libre Albedrío y tienen razón; pero quienes así piensan no toman en consideración que su Cuerpo no es suyo, sino que es prestado mientras vive su Alma atrapada en éste Mundo. Suicidarse es exactamente lo mismo que condenar a otro a morir; con la diferencia de que se trata de un Hecho irreversible que impide la posibilidad de un posterior arrepentimiento. Un Asesino puede arrepentirse de su acción y cumplir con su penitencia, un suicida no; y sin arrepentimiento, el perdón no es posible.


Las doctrinas y los dogmas son algo que van en contra del Libre Albedrío, en tanto que son imposiciones de terceros que restringen nuestra Libertad Personal. Es por ello que, nuestro “Colegio Invisible de la Rosacruz”, por activa y por pasiva, te viene recordando éste hecho en todas sus lecciones. Éstas, por otro lado, no dejan de ser otra cosa que reflexiones, meros consejos, a modo de indicación, somera, del Camino que deberías de recorrer: “Tu encuentro Personal con Cristo, tu Maestro Interior”


Aquí, en el Grado 0, “El Pleroma” te estamos indicando lo que debes de hacer o cómo deberías de hacerlo. Se trata solo de un Testimonio Personal que podrás o no aceptar. De tí depende estar y continuar con nosotros o despedirte cordialmente, mientras en la soledad de tu Hogar reflexionas acerca de tu relación con nosotros; pero debe de quedarte claro que nada ni nadie te ata a nosotros. Tú eres tu propio Tutor y el Maestro siempre estuvo contigo, dentro de Tí.


Éste Mundo, desde que nacemos, sus dirigente, sus guardianes y carceleros, nos condiciona a pensar y actuar de una y muy concreta manera. Así, según crecemos, mantenemos una lucha interior entre ese condicionamiento impuesto y nuestros verdaderos y ocultos pensamientos. Unos pensamientos que, generalmente ahuyentamos de nuestra consciencia porque no cuadran con nuestro adoctrinamiento.


Así, en múltiples ocasiones te has preguntado ¿Por qué no podemos ir desnudos por la Vida, al igual que los animales?, ¿Por qué debemos de casarnos con una Persona, en lugar de mantener relaciones abiertas y de amor libre como generalmente, salvo excepciones, sucede en la Naturaleza? Esas y otras muchas preguntas, en algún momento de tu vida te las has realizado; pero, enseguida, las has rechazado como incoherencia y locura y has seguido con tu vida como si eso no hubiese sido otra cosa que pensamientos pecaminosos. En realidad son breves resquicios de tu verdadera Naturaleza que se revela con la imposición obligada de leyes, normas y obligaciones que van en contra del verdadero “Libre Albedrío” Recuerda, una Libertad Personal con la que Dios, nuestro Creador, nos obsequió al Hombre (Macho y Hembra) y, consecuentemente, por Herencia, a toda la Humanidad.


Fue, posteriormente, el arrogante suplantador del Demiurgo, el dios de los judíos (Jehovah), el que comenzó a imponer sus caprichos. Que si debes de vivir aquí y no fuera, que si puedes hacer lo que te venga en gana; pero no toques el Fruto del Árbol de la Ciencia, cubre tus vergüenzas con hojas de parra y pieles de animales…, hasí hasta un larguísimo etcétera que han heredado, como forma de comportamiento, sus sacerdotes y legados; es decir, sus representantes, aquí en la Tierra; entonces, ¿Dónde quedó relegado el Libre Albedrío del Ser Humano? Nos ha sido usurpado por otros iguales a nosotros, y que nunca poseyeron autoridad para imponer sus caprichos. Éstos no son otros que los del propio y arrogante Autades, el Gran y Arrogante Presuntuoso.


Él y sus secuaces hacen cumplir sus dictados golpeándote con las leyes que rigen en el Mundo y te dicen: ¡Eso te sucede por ser desobediente!, ¡Regresa al buen Camino!; pero entonces, si tengo que obedecer las normas impuestas por otros, ¿Donde queda mi Libre Albedrío?


En realidad, tu libertad personal, solo puedes tomarla por asalto; es decir, hacer tu Santa Voluntad, a viento y marea de lo que pudiera sucederte como posibles consecuencias de infringir las Normas de la Naturaleza y que, no son otra cosa que las leyes que custodian los arcontes y el Gran Presuntuoso, el Espacio-Tiempo, (Cronos, Saturno, Jehová-Satán) es el principal y más importante de todos ellos.


Así, el Libre Albedrío lleva consigo la Naturaleza rebelde y anarquista (desobedecer normas que no sean las propias de nuestra Conciencia) que Caín, al Ser maldecido sembró, con su comportamiento de vida, por aquellos lugares por los que anduvo y pisó.


Nuestro “El Pleroma” no puede ser para tí si antes no te sacudes y despojas de todos los prejuicios que impiden que puedas ser tú mismo y, en realidad, te comportes de una forma moldeada por terceros y, desde luego, no seremos nosotros quienes queramos remodelar tú condicionamiento impuesto, sustituyéndolo por el nuestro; pero lo que en “El Pleroma” exponemos no es para todo el Mundo y gentes que, aún, conservan una moralina timorata en su Vida y que se refleja en su comportamiento diario.


Es por ello que sigo escribiendo para nosotros mismos hasta que tú, que nos estás leyendo, cumplas con tu Trabajo de Estudiar y demostrarnos que lo has hecho, mediante las doce tesis de nuestras doce aulas. Sí, te estamos conminando a que realices tus doce trabajos de Hércules, tras los cuales podrás ser admitido en el Grado 0, la casilla de partida, del mismo modo que Hércules fuera, tras cumplir con sus trabajos y, previamente, haber visitado el Averno, la Ciudad de los dioses, admitido en la Sagrada Ciudad del Olimpo, o Chistian Rosenkreuz, convertido en el Guardián y Celador de los aposentos de Afrodita-Venus, sus misterios.


Títulos, hasta hoy, de las lecciones del Grado 0 “El Pleroma”:


1.- El Convenio Social

2.- El Misticismo del Ano

3.- NOM, Objetivos correctos, medios equivocados

4.- Grado 0 “El Pleroma”

5.- Apología del Nudismo y Exhibicionismo

6.- Éxtasis y Sentido

7.- Anal desmitificado

8.- Higiene y precauciones previas a la Penetración Anal

9.- Llegó la Hora de los dildos

10.- Por el Ano todos somos iguales (pendiente)


Frater Tony (Hermano Lego R+C)